«LUMINESCENZA» GRATITUDE & GOOD NEWS

«LUMINESCENZA» 

GRATITUDE & GOOD NEWS

Dal tramonto all'alba

Agradecimientos

Por fin estamos aquí, una vez más. Y lo mejor, tras haber sido testigos de un holocausto salimos victoriosos (espero) y por el momento, vivitos y coleando. Me habéis amparado, ayudado con vuestras opininiones, encumbrado en mi autoestima, con vosotras he encontrado el coraje suficiente para creer que la historia merece la pena ser leída, que los personajes enganchan, que el peligro es palpable. El Magister, mezquino hasta decir basta. Que el vicioso de Graham se puede redimir aún. 

A veces, las historias se escriben solas pero éste no ha sido el caso. Al igual que a los Lackingtonians, salvar el mundo me ha cogido me improviso. Muchas vidas en juego, un sol que desaparece, el suelo se resquebraja, muertos de ojos vacíos... Un reto demasiado grande para una escritora tan pequeña. Pero no nos rendimos, pantamos cara a las sombras. No solo Graham, Ahwar, Chester, Anya, Dreyfus, Anathole... 

...María Eugenia, María Esther, Leo, Margari, Rocío, Irene, yo misma. 

TODAS  SOMOS LACKINGTONIANS, vigías de lo insólito, ángeles custodios de la tierra. 

Lack, me deseasteis suerte. King, me hiciste sentir la reina del baile. Y Onions, ya se me ocurrirá algo :) GRACIAS, amigas mías, sois la magia que este complejo mundo necesita. 

Y para el año que viene: 
Os presento a MISS CHYPRUS. Excéntrica, enigmática,  dicha, redicha y tiesa como una escoba. Amanuense, escribana, sedienta de reliquias, teórica del sanscrito, el baile de salón, la esgrima, viajera de butaca y apasionada amante del Zetabeto. Con cada una de sus veintitrés palabras melódicas, biensonantes, recónditas y aventureras... Visibles o invisibles. Reales, del todo o a medias. Su lema: Flos Duellatorum in armis, sine armis, equester, pedester de Fiore de Liberi, ¿De fiar? No sabría decirte... ¿Decente? De pies a cabeza.


Busca equipo. ¿Te apuntas? 

Si todo sale bien, será una novela ilustrada.  FELIZ VERANO. 

                        

"La maquinaria que permite producir un texto infinito 
con un número finito de elementos existe desde hace milenios... "

Umberto Eco.                             

                           Y como precisaría Miss Chyprus: "...dígase del Zetabeto."                                

* Portada de IRENE SARAVIA, mi directora creativa. Contar con su colaboración, un privilegio.

«LUMINESCENZA» CAUTION & BAD NEWS.

«LUMINESCENZA» 

CAUTION & BAD NEWS

Tenebris...

CAUTION

YA SABES LO QUE PASÓ, AUNQUE POSIBLEMENTE NO CREAS UNA PALABRA. NO IMPORTA, HUBO OTROS ILUSOS ANTES QUE TÚ QUE REHUSARON LO EVIDENTE. TE GUSTE O NO, LA TIERRA CASI SUCUMBE A LA PENUMBRA. POR ESO, PARA QUE NO DUDES Y ESTÉS ATENTO A NUEVOS INDICIOS, HOY TRAIGO AQUÍ Y AHORA LA PRUEBA DE QUE DESGRACIADAMENTE LAS BESTIAS EXISTIERON Y, UNA VEZ SIN GUÍA, SE COBIJARON EN LOS PASAJES SUBTERRÁNEOS. DONDE QUEDARON CONFINADOS SUS ESQUELETOS HASTA QUE EN JUNIO DEL 2013 NOS SORPRENDIÓ, ADIVINA ADIVINANZA, ALGO EXPONENCIALMENTE MÁS RÁPIDO QUE LA LUZ... 

                        

"NADA VIAJA MÁS RÁPIDO QUE LA LUZ A EXCEPCIÓN DE

LAS MALAS NOTICIAS QUE OBEDECEN SUS PROPIAS LEYES"

 Douglas Adams.                               

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 CULTURE

    

Walrus remains found buried under St. Pancras station in London

By Daniel Johnson                  11:11AM BST 23 Jul 2013

A Pacific walrus has been discovered among a 19th century human burial underneath St Pancras Station in London.

Archaeologists found the four-metre-long walrus with 1,500 human bodies as part of excavations at the station in 2003, amid the renovation of the station into the Eurostar terminal.

The bones were in a coffin with eight other sets of human remains, which are thought to have been used for medical research some time after 1852.

Both the archaeologist who discovered the bones, Phil Emery, and the zoologist who studied them for the Museum of London Archaeology, Alan Pipe, are not sure how the bones came to be in St Pancras Church on the northern side of the station.

“It’s a bit of a mystery”, Mr Emery told The Times.

“We did some research to see if we could find any record of a walrus being dealt with, for example, by the London Zoological Society, but we drew a blank.”

Mr Emery said there was a reference to Prince Albert “riding on the back of a giant tortoise”, but added that this was not relevant to the bones they found.

“It is possible the animal bones were being dissected as practice, but it does seem to be a rather exotic animal to be dealing with”, he added.

The most plausible reason for the walrus being in London was that it was brought to the city by whalers and sold for medical research or as a curiosity, they said.

While Mr Pipe has found the remains of an ostrich and big cats on archaeological excavations in London, this was his first encounter with a walrus.

“Although we have considerable evidence of whales in London, from porpoises up to blue whales, in all my experience we haven’t had any other bones of walruses except small fragments of skull which have been chipped to get out the tusks”, he told the newspaper.

He said that walrus skins were used for buffing metal and there was a trade in their tusks for ivory.

While how it came to be in St Pancras is a mystery even to experts, the remains can now be viewed by researchers at the London Archaeological Archive and Research Centre in Hackney, east London.

Una morsa enterrada en el metro de Londres desconcierta a los expertos

Carlos Zahumenszky

7/30/13 11:38am

Archivar en: ARQUEOLOGÍA

Las obras de ampliación de la estación de metro de St. Pancras, en Londres, para construir la terminal Eurostar destaparon un hallazgo realmente curioso: El esqueleto de una morsa de cuatro metros guardado con otros restos humanos en un ataúd de madera.

Casi diez años después de su hallazgo los científicos responsables de investigar el caso reconocen que no tienen ni idea de cómo llegó una morsa ahí. Los restos del colosal mamífero marino formaban parte de una necrópolis olvidada que data, según los investigadores, de entre 1852 y 1884. Los arqueólogos de la Sociedad Zoológica de Londres han confirmado que los huesos del animal sufrieron algún tipo de tratamiento previo a su entierro, lo que apunta a que formaban parte de algún tipo de exhibición o de material de investigación zoológica de la época.

Sin embargo, el equipo de arqueólogos que catalogó el hallazgo y los biólogos del Museo de Arqueología de Londres no han podido determinar un origen exacto ya que no existe referencia alguna a una morsa en los documentos de la época. Tampoco se sabe por qué alguien pudo decidir enterrar una morsa en un cementerio. Se baraja la teoría de que los huesos estuvieran mezclados con otros restos humanos a los que se decidió dar sepultura tras el cierre de algún laboratorio u hospital.

Los restos de la morsa serán conservados para su estudio en el centro de investigación del Archivo Arqueológico de Londres, mientras que los restos humanos han sido inhumados de nuevo. Las obras de ampliación de la Terminal Eurostar - St. Pancras se completaron sin incidencias pese al hallazgo. Tan sólo esperamos que esto no sea el preludio de un apocalipsis protagonizado por morsas en vez de dragones.

BAD NEWS

"EL PRELUDIO DE UN APOCALIPSIS PROTAGONIZADO POR MORSAS Y OTROS VASALLOS HIJOS DEL FRÍO Y LA NOCHE" SE PRONUNCIA LA PRENSA. ¿PURO SENSACIONALISMO? ¿BURDO MONTAJE? O LA PUNTA DE UN ICEBERG LUMINISCENTE... 

"Enemies to the east, enemies to the west" - Cersei says. "Enemies to the south, 

enemies to the north. Whatever stands in our way, we will defeat it.." 

WAKE UP, GEORGE, NO PUNISH DRAGONS OR MEN. IT'S AN OPEN SECRET THAT ENEMIES WILL COME FROM THE UNDERWORLD, INSTEAD OF WINTER, BE CAREFUL OF THE NIGHT BEINGS. 

                                    

* Portada de IRENE SARAVIA, mi directora creativa. Contar con su colaboración, un privilegio.

«LUMINESCENZA» Epílogo: "Apocaliptia".

«LUMINESCENZA» 
Epílogo: "Apocaliptia"

Tenebris...

     "Muchos que quisieron traer luz, fueron colgados de un farol".

                                                                                          Stanislaw Jerzy Lec

                  

              

Epílogo.  Apocaliptia. 

Estoy sentado en la sala de fumadores del club. Más solo que antes, si cabe. Perdí a Wells, mi ángel protector que se fue en silencio sin drama ninguno. Con la camisa arrugada y el Daily Telegraph apoyado sobre el halda, recapitulo sobre lo sucedido. En resumen, hemos apaciguado al mal y los días y las noches se suceden como venía siendo desde el orígen del mundo. 

Acerca de mis amigos: Ahwar se casó con su prometido Karim Makuf, un comerciante de marfil con fama de honesto. Por su parte, Chester recuperó su sonrisa metálica en cuanto se reencontró con sus libros.  En cuanto a Anya, ella sí que tuvo el arrojo suficiente para cambiar de vida, se armó de valor y volvió a Budapest, ansía saber más sobre sus ancestros. Se aleja de mi y no se lo reprocho. Nunca le dije lo que sentía por ella y es mejor así, sería infeliz conmigo, tanto como Gus, Hatchid o el mismo Wells, 

Soy tóxico, pernicioso, un parásito letal, un liquen corrosivo. Ellos son la prueba de que destrozo todo lo que toco, ni muertos les dejo tranquilos. Imaginad mi consternación cuando de camino al entierro de Wells, hallé la tumba de Gus estallada por los aires... Según Chester, los  ladrones de tumbas dieron buena cuenta de los explosivos al estilo Boston que colocamos bajo el féretro, la tumba de Gus está últimamente de lo más concurrida.  Desde mi óptica, no dejo a mi paso más que fantasmas. Sencillamente, soy un imán para el desastre. 

Así y con todo,  experimento cierta sensación de paz a ratos. Luego, escucho las campanas del Big Ben tan cercanas que me sobresaltan. En efecto, suenan demasiado cerca, el Palacio de Westminster no está precisamente a la vuelta de la esquina. Y para mi desconcierto, ni siquiera son en punto. Trato de serenarme, es un sinsentido. Me digo que el eclipse ha pasado, ratas y murciélagos se parapetan ya en sus escondrijos mientras las bestias, sin el conjuro oscuro de El Magister, se pulverizan. Puedo bajar la guardia y volver a mi vida ociosa e insustancial que ya no me llena lo más mínimo. Y en esas me hallo, lidiando por flotar sobre una frágil y ligera capa de felicidad cuando alguien me hace llegar de buena mañana el último ejemplar de la revista  Curtis's Botanical Magazine sin mi solicitud expresa. Un regalo tal vez o un simple malentendido.
Es

- Su güisqui, Sir - una mano enguantada me entrega mi copa en una bandeja junto con la publicación sobre botánica mejor considerada por la Royal Society. 

Volviendo a la mano, no es de Burton, el correctísimo jefe de sala que me viene asistiendo a diario en este mismo sillón orejero durante los últimos catorce años. Qué raro, aparenta una salud de hierro. Claro que siempre hay un primer achaque,  ya cuenta con medio siglo a sus espaldas. También me extraña que sobre el dedo anular forrado en algodón luzca el sirviente un anillo con el sello familiar. ¿Supérfluos avalorios adornando a un camarero? Imposible. Cierto, podría tratarse de un caballero en horas bajas. Y aún así, no doy crédito. Me escama, no tanto por el descalabro familiar pues las fábricas quiebran, los negocios quedan obsoletos, los bancos entran en banca rota. Es algo que, mal que nos pese, ocurre todos los días. Ya lo he visto antes, peor fue la caída de Roma. Sin embargo, crece mi desasosiego. Piensa, Graham, hay algo más. Sino me cuadra es por las estrictas reglas sobre vestimenta del servicio, eso es. Imperan la austeridad y el trato impoluto.  Busco a mi alrededor ávido de respuestas y acaso logro atisbar un par de botines negros Colchester Rubber hechos a medida que se escabullen raudos hacia la galería. En efecto, era un intruso. 

  

THE KEW GARDENS OTORGA SU GALARDÓN ANUAL DE LA MÁS BELLA FLORIBUNDA A UNA ROSA BLEU TOPAZE BAUTIZADA "APOCALIPTIA". 

"Con mis mejores deseos de nocturnidad."

                                      ω

Si se trata de un titular singular, tanto más su dedicatoria manuscrita. Mi admirador firma con la letra Omega, fascinante.  Aparte de su exclusivo calzado, compruebo que tampoco escatima en ingenio. 

                                                        

¿No es fascinante? Ese tipo se hace notar y, definitivamente, sabe algo. Y del alfabeto griego, elige omega, la letra más enigmática de todas. Es osado pero no me intimida. Mueve ficha y después se esconde.  Si estuviera en forma jugaría. Lástima que mi fuente de inspiración se secara, mi manantial eran la dama, el opio y el vino. Lo intento, pero por más que me esmero, no consigo ver más allá. Qué ha sido de mi audacia., me desinflé como un globo. ¿Sino, cómo se explica que me obceque de esta manera? Me bloqueo, no razono. Fui perito en ironías... ¿Qué me pasa? ¡Ni que fuera novato! Así es, me siento infantil, parco, simplista. Estoy ciego, sordo, falto de ideas. ¿Debería tomarme un bourbon? Quizás un trago me entonaría. Sobrio, por lo visto, soy corto de miras. Aceptémoslo, estoy lento y baldío. ¿A qué sino ese antojo por entrever en su firma un estúpido corazón invertido? No sé, siento que hay cosas que se me escapan, como la peregrina razón por la que el gavilán de Ahwar se ha quedado conmigo...  

"A las siete iglesias de Asia. 
Efeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea:  

Yo soy el alfa y el omega, el principio y el final". 

Apocalipsis de San Juan 1: 11,17                     

                            ω   

* Portada de IRENE SARAVIA, mi directora creativa. Contar con su colaboración, un privilegio.