* Oriente
Todos habréis oído hablar de la Biblioteca de Alejandría ¿verdad? Allí descansaba la palabra de los sabios y eruditos del hasta entonces mundo conocido. Miles de papiros, siglos y siglos de pensamiento del hombre. Sin embargo Alejandría llegaría a ser también el depósito de aromas y especias de la antigüedad pues los soldados de Alejandro Magno, tras sus incrusiones por India y China en torno al año 300 a.C. trajeron cientos de especias y plantas que serían estudiadas y catalogadas por el gran Teofrasto. Creían ciegamente con Hipócrates en el poder de las especias pues facilitaban la digestión, preservaban del riesgo de envenenamiento y contagio. Y sobretodo prolongaban la vida.
* Occidente
En la alta edad media la especia más valorada era el lúpulo, ingrediente indispensable de la cerveza. Si bien en el siglo XI Carlomagno fija una lista de hierbas aromáticas y especias que habrán de ser cultivadas en las propiedades imperiales. Su valor es tal que sirven de moneda y todo se paga en especias.
¿A qué tanto interés por el botón de la planta del clavo, la corteza del árbol de la canela, la nuez de la almendra del moscatero, la baya del pimentero, la raíz de coliantro, los estigmas de la flor del azafrán? ¿Qué tienen de particular para provocar guerras, iniciar expediciones? ¡Para que los más poderosos Imperios las buscaran ansiosos hasta los confines del mundo!
- Si mis recetas mágicas te suenan a cuento chino ríete cuánto quieras pero no olvides mi ofrecimiento, pues la vida es imprevisible y no para de sorprendernos.
- Si por el contrario crees en el poder de las especias no pretendas confiarles tu destino sin luchar. No te rindas ¡pon de tu parte! Ellas sembrarán el ambiente propicio, pero serás tú quien triunfe por tus propios medios.
"La joven de las Especias" (2005)
* El Nuevo Mundo
Vasco de Gama atraviesa el Cabo de Buena Esperanza en 1497 y desembarca en la India. Comerciantes árabes presentes que llegaban por tierra siguiendo la Ruta de la Seda, viendo peligrar su monopolio, le inquieron: "¿Cómo diablos has llegado hasta aquí?" A lo que el navegante portugués respondió: "Buscamos cristianos y especias"
¿A qué tanto interés por el botón de la planta del clavo, la corteza del árbol de la canela, la nuez de la almendra del moscatero, la baya del pimentero, la raíz de coliantro, los estigmas de la flor del azafrán? ¿Qué tienen de particular para provocar guerras, iniciar expediciones? ¡Para que los más poderosos Imperios las buscaran ansiosos hasta los confines del mundo!
* Libros
El olor que desprenden es tan intenso que no cuesta imaginar su influjo pero ¿utilizarlas con fines mágicos? A unos os causará incredulidad, a otros demasiado respeto. Pues hay un libro "La Señora de las especias" de Chitra Banerjee Divakaruni cuya lectura me permitió atisbar por una rendijita un ápice de su poder. Ahí ya surgen las cuestiones éticas: de ser así... ¿las utilizamos en contra de otros? Jamás. Pero ¿y si sirven para hacer bien? No hay nada de malo en propiciar bienestar, en contar con una herramienta capaz de reforzar la voluntad y la confianza de quien necesita de ese empujoncito...
* Recetas
Seguramente miraréis perplejos estas líneas pensando que mi lado místico me esta jugando una mala pasada... Siento defraudaros, pero no hablo por hablar. Conozco dos remedios naturales, comprobados en mi casa, en mi círculo, entre mis amigos. Se trata de un par de trucos de lo más inocente que no pueden sino ayudar ¿te atreves?
- En caso de tensión, dolor, disputas y recelos en el seno de una familia: Cocina un plato con almendras, preferiblemente un postre. Yo improvisé y las añadí a un arroz que puede ser dulce o salado. En el primer caso, seria semejante a un arroz con leche tradicional con leche de vaca o si lo prefieres más tropical con leche de coco. En el segundo, se trataría de un guiso de arroz y pollo. La magia consiste en añadir ALMENDRAS y dejar que hierban junto con el resto de los ingredientes. Utiliza tu propia receta, improvisa. Con que más personal, más tuya será y más poderosa. Sírvelo un día en la mesa, que lo coman todos los presentes... Verás como en unos días el ambiente se relaja y aflora de nuevo el afecto.
- En caso de dificultades a la hora de encajar en algún entorno hostil: Introduce una barita de CANELA en rama en su bolso, bolsillo o mochila de modo que la persona a la que deseas proteger parta con ella (con o sin su consentimiento) allá donde fuere. Si la persona se presta, también puedes espolvorear con canela en polvo su sien y sus muñecas. Será recibido con buenos ojos, la actitud del acosador (en su caso) se tornará amigable. El portador de la canela recuperará así la confianza, volviendo a ser él mismo.
- Hay muchas más creencias ancestrales en torno a las especias: se dice que la hoja del laurel protege del rayo y el amuleto con bolitas de comino protege de los demonios. Que con un ramillete colgado del cuello puedes ver a las hadas, si es de pimienta infunde valor. Que la esencia de vainilla en el perfume tiene el poder de enamorar, que la nuez moscada es el ingrediente principal de un elixir de amor y el jengibre masticado, raspado o confitado actúa como afrodisíaco... ¿Qué tal? ¿cómo lo ves? Confiar en lo invisible no te convierte en ignorante ¡ni mucho menos! Solo en alguien que intenta ver es más allá, que abre puertas donde otros hallan candados.... Solo es que tú miras más lejos.
* Quizás ahora, de primeras, todo esto te parezca absurdo. Si bien yo te lo cuento como quien comparte UN TESORO. Te juro que funciona y a la vez ¡no es más que un juego! Nada que perder, no entraña daños ni riesgos.
- Si mis recetas mágicas te suenan a cuento chino ríete cuánto quieras pero no olvides mi ofrecimiento, pues la vida es imprevisible y no para de sorprendernos.
- Si por el contrario crees en el poder de las especias no pretendas confiarles tu destino sin luchar. No te rindas ¡pon de tu parte! Ellas sembrarán el ambiente propicio, pero serás tú quien triunfe por tus propios medios.
Vaya bruja estás hecha (en el mejor de los sentidos, claro está). Ignoraba el poder místico de las especias, digamos para esos fines, pero, más de un mejunje casero he hecho con buenos resultados en cuestiones prácticas.
ResponderEliminarA mi me encantan las especias, sus olores sobre todo, me recuerdan a infancia, cierta tienda donde compraban mus padres y una ciudad.
Y las almendras?? Las almendras en un batido es un sabor inolvidable pero que no he vuelto a encontrar tan fácilmente. Pasé algunos veranos en acampadas en Marruecos, así que te puedes imaginar.
Y volviendo al tema ( que me disperso) tengo una piedrecita de playa concreta y regalada que siempre llevo conmigo que tiene su "poder", no sé si funciona pero... Experimento, jaja.
Un beso!!!
Las almendras, con esa mezcla de dulce amargor, tienen algo especial. El sábado probé un plato marroquí de pollo, pasas, canela y hojaldre tan rico que por poco levito :)
EliminarTu piedra de la playa tiene poderes, te lo aseguro. Si la llevas contigo, aunque tú no lo sepas te allanará el camino.
*Con esta visita te declaro Recordwoman en llegar la primera al blog. Plusmarca difícil de superar. Desde que tienes esa piedra... Vaya, no hay quien te pare :D Un beso
Jajajajaja, la piedra la llevo hace bastante, es el móvil lo que me ayuda superar la plusmarca. Eso y rabillos de pasa, que me recuerdan que hoy es martes y he quedado con Mere.
EliminarPastela quizás?? yo también levito, jajaja, incluye en los planes fantasti-deliciosos de a saber cuándo. Alguna recetilla de esas culinarias tengo si quieres.
Almendras y canela tienen grandes detractores, a mi me gustan las dos (más para nosotras, jajaja).
Justo eso ¡pastela! Qué rica... Sí, por fa, si las tienes a mano me pasas tus recetas. Cuando vengas a Mrdd te llevo a comer pastela ¿Y de postre? Uf, que dilema... Nos los pedimos distintos y compartimos :)
EliminarEl movil es cuadrado, plasticoso y es tan saborío que no huele a nada pero a su manera, también tiene su magia. Bss
jeje...Y LA COCINA DE CASA!!!, porque verás, mi esposa es una brujita consumada en las artes de las infusiones, vamos, es que tiene remedios para todo. Ya te puede doler lo que quieras que...se mete en ese armario, empieza a rebuscar y te prepara un campano con tal mezcla que mejor no preguntes qué hay dentro, jajajajaja. Y FUNCIONA!!!!
ResponderEliminarCierto, todas las culturas han tirado de la rebotica de Natura. Y es curioso; es curioso cuando la gente llama a eso "natural" en contraposición a los "potingues llenos de química". Lo cierto es que todas y cada una de las hierbas que tienen virtudes más que reconocidas poseen principios activos, muchos de los cuales, muy potentes, tanto...que tomados a la virulé son incluso venenosos. Y los principios activos no son más que recombinaciones moleculares de ciertas substancias, química, vamos.
Y funcionan, vaya que funcionan.
Un beso
En casa, con Mari ¡tienes una joya! Esa mujer vale un potosí. Hacéis una gran pareja :)
EliminarTienes razón, las sustancias que hay en las hierbas, los hongos y las especias son ¡tan efectivas! que en exceso pueden resultar peligrosas. Claro que con una brujilla al lado, ya todo son ventajas. Un beso
Aix Mere, que maravilla de entrada, como me ha gustado!!!!! Yo me lo creo sabes una cosa? Mi película prefirida es un toque de canela y si miras en mi blog (te invito) la pestaña la señora de las especies es el mismo título que tu video.
ResponderEliminarYo voy a tomar nota de tus ancestrales consejos.
Un besooooooooooooo
No sé, conociéndote como te conozco intuía que te gustaría :) Aquí, entre brujillas, ese vino tinto en la terraza también debió causar sus efectos... Tomo nota: una botellita, 2 copas, pillo por banda al otro "A" y a decirnos susurrillos :)
EliminarUn beso
Bueno, Mere, ¿qué puedo decirte? Si bien es cierto que encanta esa mezcla de colores exóticos repartidos en pequeños vasos de vidrio (o plástico), yo y la cocina somos, más bien, conocidas y no siempre muy buenas amigas. No me gusta especialmente cocinar, aunque, claro, es lo que toca. Encuentro siempre un sinfín de actividades mucho más interesantes cuándo me propongo probar una nueva receta. Se quedan tan bonitas en las fotos, pero luego...demasiado ingredientes....demasiados utensilios para fregar....buff. ¡Me riendo fácilmente! Ehheheheh
ResponderEliminarUn beso,
Te entiendo, Marisa. Yo también le tenía miedo a la cocina pero lo cierto es que es un mito. No es nada difícil, todo es ponerse. En concreto le tenía pavor al horno y con el tiempo me di cuenta que es lo más fácil de todo, se va haciendo allá adentro y casi, casi ¡qué te olvidas!
EliminarLo de fregar... eso si no lo llevo bien. Pero si sale rica la comida, hasta compensa :) Un beso
Ahahha..con el horno ya me las he arreglado, después de tirar muchos proyectos directamente a la basura. Buenos amigos :) Mi problema es pura pereza, creo. Un beso,
EliminarMere yo que soy un cocinilla para los arroces, uno de mis platos favoritos, probaré el tema de las almendras y lo del palito de canela me lo pondré en la mochila a ver que tal, aunque de antemano soy creyente para lo que nos cuentas, faltaría más.
ResponderEliminarMe rindo y me quedo desarmado ante tus conocimientos, así lo reconoce el agente 008 que sigue tumbado en la hamaca, pensando, en un lugar paradisiaco.
Muchos besos
Eso, eso, prueba los trucos ¡y ya verás! Con el arroz de almendras y la rama de canela los tendrás a todos ¡en el bote! *No creas que se tanto, Agente 008, lo que pasa es que doy el pego. Por fa, guárdame el secreto :)
EliminarUn beso
Me ha encantado.Y compartir es amar... te contaré un secreto...entre unos pocos aficionados a los libros,decimos eso de olor a libro viejo. Todos lo notan,pocos saben lo que significa... cuando un libro amarillea y tiene ese olor que tanto apreciamos... (bajo la voz) es porque en su composición hay un elemento en común con la vainilla,de ahí el olor agradable al fondo de la nariz y ese color característico... sólo añado que la vainilla,es uno de los mejores remedios para la falta de imaginación,y para el aburrimiento.
ResponderEliminarBesos
PD.Te superas!está claro que tú no necesitas tomar vainilla :-)
El libro antiguo despeja la mente, suda las manos, ilumina los ojos. Letras con vainilla... no imagino mejor receta.
EliminarHay días que me vendría muy bien un toque de vainilla y así ¡encontrar ideas!
Compartir es maravilloso :) Un beso
No hace ni una semana que terminé de leer precisamente este libro que nos mencionas, y sí, yo creo en que puede ser cierto ya que justamente lo que nos compartes de la barrita de canela yo lo sabía ya por mi madre. Lo cierto es que muchas personas son reacias a estas "curas" naturales, sin embargo por sí solas no hacen nada pero sí pueden si una cree en lo que hace, por tanto de reirme nada preciosa, sino todo lo contrario, me ha encantado el post de hoy.
ResponderEliminarBesitos!!!! Y qué dulce y bueno es el aroma de vainilla, y digo este porque es el que más me gusta a mí.
¡Qué casualidad! ¿Te gustó? Supongo que sí. La gente se empeña en complicarse la vida cuando las soluciones son sencillas y están muy cerca, en las cosas del día a día y ¡cómo no! En nosotros mismos.
EliminarTú madre sabía de la vida, seguro que te dió muy buenos consejos :) Un beso
En respuesta a tu pregunta Mere, te diré que el libro me encantó, es más, no sabía que estuviera la película y ya la estoy buscando para poder verla. Si se ajusta al libro, será una delicia verla.
EliminarBesitos!
La peli está bien, pero es fácil que habiendo leído el libro te decepcione un poco. Demasiado comercial tal vez. Hay cambios radicales, sobretodo en el perfil de la protagonista... Aún así resulta deliciosa.
EliminarOjalá que te guste, un beso.
Me encantan las especias. Lo del valor místico de cada una no lo conozco pero como tú dices, todo es probar, no se pierde nada ;) Me gusta la canela en la repostería, la pastela y los dulces árabes con almendras son mis favoritos, hago lokum, muy a menudo como el que ponen en los mercadillos de la plaza de Santo Domingo en Madrid o en el turco de Cuatro Caminos y en cuanto a los olores: el de los libros me encanta, también el oilor a cítricos pero me ocurre algo de pequeño: me siento irremediablemente atraído al olor a lilas y violetas... no sé por qué... si está en la composición de alguna colonia los identifico al instante, si estoy en una floristería y hay acudo como una abeja, es rarísimo. Un beso :)
ResponderEliminarA mi también me encantan los postres árabes con almendra, pistacho, hojaldre y en vez de azucar, miel.
EliminarEl olor a violetas es cautivador. Ahora si lo distingues con tanta precisión, es otro motivo para SER INCREÍBLE. Y sobretodo, disfrutas de lo lindo :)
Un beso
Madre mía cuanta combinación exótica. Algo experimentaré porque en casa cocino yo. Soy muy fan de la nuez moscada y de la canela. La vainilla la dejo para los helados.
ResponderEliminarMe ha encantado la parte mística de todo esto.
Besos.
Si eres el cocinero en casa, tienes "la sartén por el mango" (nunca mejor dicho) Puedes hacer ¡maravillas! Y ya me dirás si cambias algún destino :)
EliminarUn beso
No he leído el libro, pero las recetas me las apunto. Por probara no se pierda nada, y daño no van a hacer. Yo tuve una época medio "brujil" jajajaja, en mi juventud, e iba con mis amuletos y mis pociones a todas partes :). Me encantan las brujas y las hadas! Cuándo vuelva a nacer quiero ser una bruja, pero de las de la berruga en la nariz no, eh!
ResponderEliminarBesos, y muy entretenida tu entrada!! (como todas las tuyas, la verdad)
Tengo una teoría, la diré en flojito para que no me tomen por loca: "Hay mujeres de carne y hueso que actúan como hadas" salpicando el mundo de pequeñas chispitas... Lidia bien podría ser una de ellas ¿a qué sí? Un beso
EliminarTotalmente de acuerdo contigo Mere!
EliminarBesos!!
Las dos la conocemos bien :) Bss
EliminarHola Mere... me han gustado tus recetas mágicas y el poder de las especias.
ResponderEliminar"La joven de las especias", no he visto esta película y me parece que me gustará.
Muy bueno lo que has contado sobre Oriente, Occidente y el Nuevo Mundo.
Besos
Pues si te han gustado, Mela, no te cortes y ponlas a prueba.
EliminarLa peli es muy bonita, pero el libro es muchísimo mejor. En la novela la maga es una anciana y claro, eso en el cine no vende.
Qué bien que te fijaste en el rastro de las especias en el pasado. Para mí, lo mejor de todo :) Un beso
Tus letras fluyen tan magistralmente, que conseguí abstraerme de todo y comencé a viajar por lugares exóticos y oliendo en todo momento las especies que detallas.
ResponderEliminarMe gustó mucho sentir la urdimbre de tus pociones.
Un abrazo.
Pues qué bien, Jorge ¡menudo viaje! Seguro que disfrutaste un montón. Una experiencia plena, con los cinco sentidos :)
EliminarUn beso
¡Qué deliciosa perspectiva! Yo las almendras las pongo en el chocolate (que me encanta). Imagino que también servirá, pues la gente lo come muy a gusto. En cuanto a la canela tendré en cuenta la indicación; nunca viene de más una ayuda para dirigirse a ciertas personas de escas empatía.
ResponderEliminarBesos, Mere. ¡Qué atareada estás!
Bravo, Ignacio, las almendras en el chocolate también valen. Es más, tiene tu toque personal y debe de estar riquísimo.
EliminarYa verás cómo ¡funciona! Dentro de unos días me lo dices :)
Un beso
Uys, lo que he visto hoy por aquí. Con lo que me está dando por usar las especias últimamente en las comidas. Me lío a echar especias y hago unos rebujos más raros... Pero están buenos!
ResponderEliminarAdemás, me gusta el arroz, me chifla las almendras... ¡Tengo que probar esa receta! Y voy a por una ramita de canela para meterla en el bolso.
Besotes!!!
Yo también hecho más que menos. Ya verás, poco a poco le iremos cogiendo el punto. No se si estará rico, pero sí exótico.
EliminarEl arroz con almendras te gustara. Y la barrita de canela... efectos inmediatos :) Un beso
Leyendo "Lloviendo Historias" nunca se acuesta una sin saber algo nuevo! ;) Desconocía el poder místico de las especias, algunas de sus propiedades y que fueran tan codiciadas.
ResponderEliminarYo no soy muy de creer en recetas mágicas pero también es cierto que si no hace daño a nadie... ¿por qué no? No creo que tenga nada de malo cocinar un plato con almendras cuando hay "malos rollos" aunque sea sólo por si acaso. Y si tiene éxito doble alegría: Solucionas un problema comiendo algo muy rico. Cualquier plato con almendras, mmmmmmm :)
Son creencias ancestrales que se transmiten de padres a hijos. No obedecen a explicación científica alguna, pero algo que pervive en la tradición durante miles de años ha de reportar algo bueno. Al fin de al cabo somos animales y muchas veces nos influye el entorno: que si la noche, que si la lluvia... nos cambia el estado de ánimo. ¿Por qué no una especia que embriaga los sentidos? Si como tu dices, está ¡tan rica! lo menos nos pondrá de buen humor y después de eso... ¡todo lo demás! Actitud azul :)
EliminarUn beso
Si, si, creo en las especias, ahí están con su magia y sus milagros...
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