martes, 29 de octubre de 2013

Buscando a Robert desesperadamente



Edinburgo, 17 de octubre del 2013

Llego a Saint Mary Street. A la derecha, en la esquina, está el pub World´s End tan animado como siempre. hoy también lo frecuentan violinistas y cantantes... Claro y es que así, de primeras, el de hoy parece un día como cualquier otro. A mano izquierda  discurre la concurrida Jeffrey Street que enseguida hace una curva para sumergirse bajo el gran ojo del North Bridge y allá que voy, internándome en su laberinto. Es lo que tiene esta ciudad, sus calles suben, bajan, se retuercen y se ocultan como jugando al escondite. La piedra gris, el Fife (o viento del norte) y esa lluvia tenaz e intermitente hacen de Edinburgo un lugar atemporal, irreal y enrarecido, perfilado de cuerdas celtas que cantan rebeliones fallidas. A través de un hueco entre los edificios se entreven las banderas tricolores del Hotel Balmoral ¿hace un té? No me interesa. Tengo un plan, un oscuro plan... que si la niebla no me ciega, culminaré pronto con éxito. 

Cruzo la calle y desciendo la colina para aterrizar justo delante de una pescadería, esa con el cartel de un pez dorado colgando junto a la puerta. Paso de largo, no es allí donde me dirijo. No dudo que el salmón escocés sea una auténtica delicia, pero no he venido a comer sino a buscar el origen mismo del dolor... Quizás en otra ocasión, menos lamentable. 

Avanzo un poco más, titubeante, hasta alcanzar un pasaje de estrechos callejones que se adentran en la parte baja de unas casas de vecinos. Un gato entra sigiloso, pero yo no le sigo. Comienza a chispear y no llevo paraguas. Decido mojarme, a ver si crezco como las plantas y paseo sin prisas hasta que a pocos metros de High Street distingo las torres de Canongate Kirk. La tengo frente a mí, hermosa, sencilla. Emerge en lo alto como una isla. Camino despacio, casi de puntillas, al atravesar el pórtico. Se trata de una iglesia antigua de alto techo a dos aguas y grandes ventanales. Por dentro es luminosa y alegre, con bancos azules sobre una alfombra tupida en granate. En cambio, por fuera, parece estar de luto por el vidrio blanco sin color en los cristales. Arriba descubro el emblema de la iglesia, un venado también dorado de brillo apagado. Sus destellos se extraviaron con el sol, perdió el lustre y lo prefiero. En esta hora todo ha de ser gris, que llore la tierra y el cielo. 

Solo penetrar en el jardín de cruces levanto la vista... me gustan los cementerios. Se respira más paz que en ninguna otra parte en medio de un silencio que no es tal pues vagan flotando miles de recuerdos que ni sabemos descifrar ni tampoco nos pertenecen. Me adentro en el césped esquivando otras tumbas llorosas hasta encontrar lo que busco: una lápida labrada en forma de glabete que rebosa melancolía, justo donde descansa el poeta Robert Fergusson desde que falleciera con apenas veinticuatro años.. Nadie merece morir y menos tan pronto.  En la losa reza una inscripción en su honor, que permanece aún legible después de doscientos años:

“Esta sencilla piedra guía a la pálida Escocia
Para verter sus penas sobre el polvo de su poeta”

Así la mandó escribir el propio Robert Burns, como homenaje a su gran amigo y colega. Miro a mi alrededor y mi mirada se detiene ante la impresionante tumba de Adam Smith, reputado científico y pionero en macroeconomía.  Ostentosa y recargada, por lo demás aséptica y carente de dolor. No hace brotar lágrimas como la de Fergusson, más bien parece una estatua. Es entonces que vuelvo con el poeta, saco del bolsillo de la chaqueta un papel doblado en dos,  algo mojado por los bordes. Lo desdoblo, por suerte no se corrió la tinta y leo en voz baja, como en susurros, el poema que a su muerte le dedicara Robert Garioch:

Canongate Kirkyard en el año que se acaba
Es antigua y gris, sus pequeños rosales están desnudos
Y cinco gaviotas blancas brillan en el apagado cielo.
¿Por qué han venido? Aquí no hay nada para ellas.
¿Por qué estamos aquí nosotros?
Intenso, presente dolor
Oprime mi corazón. No oses tratarlo a la ligera:
Aquí, Robert Burns se arrodilló y besó el suelo.  


Y te preguntarás ¿por qué he venido? No sé, en ausencia de sus amigos pensé que alguien tenía que hacerlo. Hete aquí que por una carambola del destino tú y yo fuimos hoy ese "Alguien" llamémosle Robert (de haber reparado Oscar Wilde en tan extraordinario detalle, en The importance of being Earnest, Ernesto no se llamaría Ernesto sino Robert) ¿Y qué pasará el año que viene? No te apures, la historia se repite y como El pirata Roberts que tuvo tantos rostros, "otro Robert" será quien coja el testigo y acuda a la cita. Mientras el mar no muera y las palabras no callen... Por Edinburgo siempre merodeará algún Robert buscando aventuras y otro Robert que le llore. ¿Qué más puedo añadir? River Runs, my friend. Gracias por acompañarme.  




Karine Polward sings "River runs" 
Poem by Robert Burns

martes, 22 de octubre de 2013

Escuela de magia ¡a tu alcance!




No es ningún secreto, el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería es un internado en medio de las Highlands a los pies de un lago, no muy lejos de Dufftown y jamás lo avistaremos, pues es velado a muggles por poderosos encantamientos anti-aparición. El castillo está a salvo de los curiosos, de rondar alguien por los alrededores no hallaría más que ruinas. Además la mayoría de los dispositivos electrónicos no funcionan en los terrenos de Hogwarts, que en sus años dorados llegó a contar con más de 1000 estudiantes. Su lema es: "Draco dormiens nunquam titillandus" que vendría a ser algo así como "nunca hagas cosquillas a un dragón dormido." Magnífico consejo, todo hay que decirlo. A parte de las asignaturas obligatorias de Pociones, Transformaciones, Herbología, Encantamientos, Defensa contra las artes oscuras, Historia de la magia, Astronomía y Nociones básicas de vuelo, también se practica quidditch y cantan en coro un himno singular. Como véis, Hogwarts ofrece un programa muy completito... pero ¿hay plazas para nosotros?

En lo que a nosotros respecta, esto es lo que hay:  Si una pluma mágica detecta el nacimiento de un niño español dotado de habilidades, escribe su nombre en el largo pergamino que la profesora Minerva McGonagall habrá de consultar cada verano para cumplimentar las Cartas de Admisión. Sin embargo, ninguna de nuestras cartas llega jamás a su destino... ¿Por qué? Parece ser que el Canal de la Mancha está surcado por fuerzas oscuras que impiden el trasiego normal de un correo mágico fluido ¿Acaso está matriculado en Hogwarts alguno de tus vecinos?

Por suerte, Hogwarts es una escuela de magia muy reputada, pero no la única. Habría otras dos escuelas de magia en Europa: la "Academia de Magia Beauxbatons" localizada en Francia y el "Instituto Durmstrang" dedicado a las Artes Oscuras en algún lugar remoto e impreciso del norte de Europa. En todas ellas se entrena a personas con habilidades mágicas para que se conviertan algún día en magos y brujas cualificados. En España hay muchas personas sobradas de coraje, rebosantes de audacia e ingenio, preparadas para  hacer un buen papel en cualquiera de estos centros ¡destacando incluso! Pues bien, según  tengo entendido NO consta, entre el alumnado, ningún compatriota nuestro. Y aunque así fuera, aún si se hubiera logrado colar algún españolito de a pie entre tanto niño prodigio... ¿vamos a permitir que siga engordando nuestra dramática avalancha de fuga de cerebros? 




Pues bien, decidí investigar nuestras posibilidades y no he cejado en mi empeño hasta encontrar para nosotros y nuestros hijos un paraíso mágico, un lugar donde podremos desarrollar todas nuestras habilidades alquímicas, inductivas y extrasensoriales. Así es, desde el pasado sábado 19 de octubre ya podemos cursar ESTUDIOS UNIVERSITARIOS DE ILUSIONISMO en el Real Centro Universitario María Cristina de San Lorenzo del Escorial bajo un entorno místico e inspirador: a los pies del Monte Abantos, a escasos metros del Monasterio, entre aire fresco y paredes longevas.

El  Programa Académico "Wenceslao Ciuró", pionero en el mundo, consta de nueve trimestres con la participación de treinta profesionales especializados en todas las artes mágicas. Durante tres años se impartirán clases magistrales de Mentalismo, Cartomancia, Numismagia, Hilos de invisibilidad, Sombras chinescas, Artes afines, Magia en escena, Magia infantil, Magia de salón,  Filosofía e Historia de la magia y Desarrolo del pensamiento paralelo. Será un fin de semana al mes con ocho horas de prácticas, recibiendo al concluir exitósamente los estudios, un "Certificado Superior de Ilusionismo" y en su caso, el ansiado "Título universitario de Ilusionismo" para los alumnos más aventajados, siempre acompañados de inmejorables referencias e inolvidables encuentros con los más grandes maestros.

"Un buen mago necesita conocer todas las disciplinas del mundo de la magia, saber crear el ambiente propicio, transmitir una ilusión, ser versátil y estar dispuesto a improvisar, adaptándose intuitivamente a la situación, por extraña que parezca"Si cuentas con estas dotes naturales, esta puede ser tu escuela. Solo acudirán unos pocos afortunados... Piensatelo, podrías encontrarte entre ellos:


"Voyageurs Egarés" Comedie magique 
Théâtre Trevise, Paris

martes, 15 de octubre de 2013

Voyeurs de madrugada





Irial sueña cada noche en tres dimensiones, con los cinco sentidos. Y la envidio, créeme, pues se involucra en cuerpo y alma en un sinfín de vidas paralelas. Cierto, un sueño solo es un rato, pero si se vive tan intensamente, llegas a recrear mundos enteros a tus pies, como si de planetas de Star Wars se tratase. Hasta ahí, genial. Toda una experiencia única, gratis y sin moverse del catre. Preparativos, los justos: pijama, almohadón, persiana baja, puerta entornada, libro para los preliminares y recomendable, sobre la mesilla un vaso de agua. Ay, pero falta algo: el eterno tic-tac que cuenta nuestros minutos a oscuras amenazando con sonar y desbaratarlo todo. Es inevitable. A cada noche, el día le pisa los talones y no claudicará. No escaparemos al alba. Después del viaje, siempre habrá un despertar por muy lejos que te lleve. Volver a la realidad, dejar atrás personas y lugares que, reales o no, nos empapan en sudor, hacen que nos hierva la sangre. Lo sé, volver a la rutina puede llegar a ser traumático y  pasa en cada dormitorio. 


Por eso te invito a mirar por la ventana
Solo por hoy, Voyeurs de madrugada:


* Curioseemos en el número 102 del Boulevard Haussman. París, 1907. Marcel Proust no sale de casa, escribe de noche y duerme de día, tic-tac. Por entonces sufre continuas crisis de asma, está sumido en una profunda depresión y salta a la vista que padece problemas de insomnio. Si bien confía temerariamente en el despertar, como un renacer con el sol a la vida que comienza. 



"Se llama a esto un sueño de plomo, parece que uno mismo se haya convertido, por espacio de algunos instantes después de haber cesado un sueño así, en un simple monigote de plomo. Ya no somos personas. Entonces, ¿cómo es que al buscar uno su pensamiento, su personalidad, como quien busca un objeto perdido, acaba por recobrar su propio yo antes que otro alguno? ¿Por qué cuando empezamos a pensar de nuevo no es entonces la que encarna en nosotros otra personalidad que la anterior? No se ve qué es lo que dicta la elección y por qué, entre los millones de seres humanos que uno podría ser, va a poner precisamente la mano en aquel que era la víspera. ¿Qué es lo que nos guía cuando verdaderamente ha habido interrupción (ya haya sido completo el sueño o los sueños enteramente diferentes de nosotros)? Ha habido verdaderamente muerte, como cuando el corazón ha cesado de latir y unas tracciones rítmicas de la lengua nos reaniman. La habitación, desde luego, aunque solamente la hayamos visto una vez, despierta recuerdos de que penden otros más antiguos. ¿Dónde dormían en nosotros algunos de que adquirimos conciencia? La resurrección en el despertar —después de ese benéfico acceso de enajenación mental que es el sueño— debe de asemejarse, en el fondo, a lo que ocurre cuando se vuelve a encontrar un nombre, un verso, un estribillo olvidados. Y acaso quepa concebir la resurrección del alma allende la muerte como un fenómeno de memoria".

El mundo de Guermantes 



* Trasladémonos ahora con Frank Kafka a su casa de Bbiekgasse. Praga, 1913. Ahí lo tienes, dormitando plácidamente tic-tac hasta que con el primer haz de luz, amanece el genio sumido en un caos de pérdida y desorientación. ¿Crees que tiene resaca? ¿o que estuvo haciendo el crápula hasta bien entrada la noche? Para nada, no es eso. Lleva una vida discreta, ahora vive con su hermana. Solo es que abrir los ojos, al checo le cuesta horrores. Su despertar es el abrupto retorno a un mundo donde nada está en su sitio y no le queda otra que levantarse a recomponer los pedazos. 



"Alguien me dijo, ahora no me acuerdo quien, que cuando nos levantamos temprano, resulta extraño encontrarlo todo en el mismo sitio en que se dejó por la noche. La vigilia, al menos en apariencia, es un estado muy diferente al del sueño y como ese hombre dijo con razón, se necesita una gran presencia de ánimo para, con los ojos abiertos, situar todos los objetos en el mismo lugar en que quedaron la noche anterior. Por esto mismo, el instante en el que despertamos es el más arriesgado, un vez que se ha superado, sin quedar desplazado del lugar, podemos seguir viviendo confiados el resto del día. A qué conclusiones llegó ese hombre... ahora me acabo de acordar de quién era, pero su nombre es indiferente" 

El proceso



Ya ves, para Kafka el viaje a lo onírico es tan intenso que por la mañana apenas recuerda los detalles de ayer. Han pasado unas horas ¿o siglos enteros? Concibe la experiencia de "volver en sí" como un momento arriesgado y aunque desea vivir más que nada, también le asusta poner los pies de nuevo en el suelo.

He aquí dos hombres ante un fenómeno del todo extraordinario: Marcel despierta esperanzado, pero no logra salir de casa mientras Frank amanece con reservas, lo hace ¡temblando! ero se crece conforme clarea la mañana. Dos caras de la misma moneda, si me apuras, a cual más humana.

* Y tú, miras de reojo ¿o sonríes al alba?
Para los budistas, despertar es un milagro.

"Wake me Up" Avicii (2013)

* Irial, que tus mundos se hagan realidad

martes, 8 de octubre de 2013

MEN & WOMEN WANTED



"Se buscan hombres para un viaje peligroso. Sueldo escaso. Frío extremo. Largos meses de completa oscuridad. Peligro constante. No se asegura regreso. Honor y reconocimiento en caso de éxito".



Este anuncio del Times fue osado y provocador, rayando en lo suicida y causó un gran revuelo en el acomodado Londres de 1914. Al alboroto inicial, le siguió el silencio latente y una ciudad expectante... Contra todo pronóstico, respondieron al llamamiento nada menos que ¡5000 intrépidos aspirantes! Por su parte Shackleton prometió mucho sudor, apenas gloria... El veterano explorador no faltó a su palabra, proporcionó a quienes le siguieron una buena dosis de aventura:

El Endurance partió de Londres el 1 de agosto con una tripulación de 28 hombres, tenían previsto cruzar la Antártida de costa a costa pasando por el polo sur en una travesía glaciar de 3000 kilómetros. ¿Se trataba de un plan ambicioso? Desde luego, entrañaba enormes riesgos. Y la suerte les dio la espalda: La aventura antártica como tal terminó antes de empezar, pronto nuestro barco quedaría atrapado por la presión de los hielos dando al traste con el proyecto antes incluso de tocar tierra. Cómo sospechar ni remotamente que justo entonces comenzaba LA AUTÉNTICA ODISEA pues tardarían en regresar "la friolera" de nueve meses a Isla Elefante ¡todos sanos y salvos! a bordo de un remolcador chileno, gracias a la tenacidad de un líder para quien lo primero eran sus hombres.

En efecto, la expedición en sí fue un tremendo fiasco si bien Shackleton no volvería derrotado. La apuesta valió la pena ¿por qué?

"Revives después de algo así, hasta el sencillo acto de respirar resulta extraordinario" 


Corrían los tempranos años 10, todavía por entonces nacían personas con madera de héroes. Pero ¿y ahora? ¿Nos atrae lo desconocido? ¿Emprenderíamos una aventura hacia la mismísima muerte? Creo que aún existe la figura del auténtico aventurero, que sueña con emprender un viaje incierto y muy pronto lo sabremos porque EL RETO CONTINÚA: Se prevé la primera misión tripulada a Marte de la NASA para el 2030. De hecho la agencia espacial ya anda buscando tripulantes con el perfil psicológico idóneo para soportar un viaje orbital de larga distancia.


Y si leyeras...


* Página 23 del New York Herald. Un miércoles cualquiera...   "Se precisan hombres y mujeres dispuestos a pasar 2 años en una cápsula espacial no mayor que un autobús. Cultivar su propio alimento y obtener bebida mediante reciclaje de orina, en su caso combustible o por condensación del agua en el aire. Atender por sí mismos cualquier urgencia médica así como esquivar cientos de meteoritos mientras experimentan un lento pero inexorable deterioro muscular a causa de la microgravedad acompañado de un sentimiento severo de aislamiento y separación de la Tierra, que aparecerá ante sus ojos como un punto azul en el cielo, pudiendo llegar a provocar brotes paranoicos o derivar en episodios suicidas."


¿lo dejarías todo
para perderte en las estrellas?


¿Viajar a lo extremo? Toma aire, la decisión es muy sencilla. Life is in the air... todo depende del modo en que respiras.


martes, 1 de octubre de 2013

Amigos de las arañas ¡uníos!

La araña aparece pequeña y sigilosa desde su mundo subterráneo, actúa entre las sombras... Es un beso sin carmín y basta con un pinchazo.


* J. R. R. TOLKIEN descubrió de niño en Bloemfontain (Sudafrica) su pasión por los mundos fantásticos tras ser picado impunemente por una tarántula de la familia de las arpactirinae que le hizo delirar de fiebres, al borde de la muerte, durante días. El escritor pasó su convalecencia leyendo una enciclopedia sobre criaturas mitológicas, que años después formarían su universo literario. ¿Hasta qué punto aquella picadura influyó la mente del bueno de Tolkien, despertando al genio? Las cosas no pasan por casualidad, aquel "fatal" encuentro entre hombre y araña bien pudo ser el detonante de un sinfín de historias maravillosas donde confluirían seres brillantes y oscuros.

Las grandes arañas serían elementos recurrentes en los mitos sobre la Tierra Media. Así la novela El Hobbit describe una colonia de astutas y grandes arañas al norte del Bosque Negro a finales de la Tercera Edad y los elfos del reino de Thranduil intentarían sin éxito exterminarlas. La compañía de Thorin sería capturada por las arañas y atrapada en sus redes. Sin embargo, Bilbo lograría liberarlos con ayuda de su espada Dardo y del anillo mágico. Estas arañas eran crías de Ella-Laraña, a su vez hija de Ungoliant y aparecerían en El Señor de los Anillos tras la caída de la sombra en torno al Bosque Negro. El germen de un mundo jamás imaginado que no cesaría en retroalimentarse de luces y sombras. 

Pero esa repetitiva aparición de arácnidos gigantes en las historias de Tolkien, realmente ¿a qué se debe? Siente un gran pavor, cierta  fascinación ¿o ambas cosas? Así es, la tarántula desencadenó en Tolkien toda suerte de sentimientos contradictorios. Le aterrorizaba su nombre, su sola presencia... Pero también fue su musa, más inspiradora que la propia Meletea del joven Homero desde el monte Helicón en Beocia. Definitivamente, SIEMPRE HABRÁ UNA MUSA TRAS UN VIAJE ÉPICO. Pero sobre etéreas musas, no está todo escrito. Quedan lagunas por lo que aspectos como el número de patas y temperatura corporal no deberían de ser concluyentes. Además en temas de belleza... ejem, todo es relativo. El cortejo es todo un arte. Y para seductoras... Ahí tienes a LA VIUDA NEGRA, sin ir más lejos.

* Damos un salto en el tiempo. Corrían los años 60, en plena Guerra Fría, el miedo a una guerra atómica estaba latente en las calles. Es entonces que el guionista y editor de cómic STAN LEE decide crear una serie de superhéroes mutantes usando la radiactividad como excusa. Así es como Spiderman debutó en la moribunda serie de «Amazing Fantasy» en el ya mítico número 15 de agosto de 1962, en sus viñetas obtendría superpoderes al ser picado por una araña radiactiva. Una araña de laboratorio expuesta a radiación convertía por primera vez en la historia del cómic a un adolescente enclenque, marginado, empollón, huérfano que vivía con sus tíos ancianos… Cierto, Peter Parker no cuenta con una flamante presencia ni el mundo le da la bienvenida con bombo y platillo. Spiderman, como la araña, procede de los bajos fondos y permanecerá en la sombra, oculto e incomprendido. Realidad y ficción se entremezclan... De nuevo la picadura no era más que el principio. 

* Es más, la fascinación del mundo friki por el arácnido no ha hecho más que empezar: En el universo Ultimate hay otro Spiderman del siglo 21, esta vez afrolatino, llamado Miles Morales. En esta ocasión nuestro hombre también es picado por una araña manipulada genéticamente. Miles posee el don de la invisibilidad y un efecto paralizante si te toca con las manos. La seda de arañas contiene espidroína, uno de los materiales más resistente de la naturaleza, incluso más que un cable de acero de similar grosor y muy elástica, podría soportar el peso de Spiderman balanceándose entre los rascacielos. La ciencia, carente de prejuicios, investigó la espidroína aportando su extraordinaria resistencia y elasticidad a los nuevos chalecos antibalas, inmunes a fuertes impactos. Y si repele las balas ¿no es cuna de héroes a gran escala?

La araña es símbolo ancestral de viejo y oscuro, de veneno y traición. Pero ya existía el monstruo ¿o fue nuestra maldición? Es simple, el miedo es un hervidero, no hay elixir más efervescente... La araña no pertenece al lado oscuro, la arrinconamos nosotros.



 Por eso propongo, ante lo injusto de la situación, seguir los pasos de Tolkien, Stan Lee, Lei Jiang, de la Academia China de Ciencias de Pekín y del biólogo molecular Tadolph Lewis de la Universidad de Wyoming. Creemos en España la asociación "Amigos de las arañas" sin ánimo de lucro con un solo objetivo: DIGNIFICAR A LA CRIATURA. En nuestras reuniones vestiremos de negro, recrearemos la humedad del Amazonas, estudiaremos las lenguas inventadas por Tolkien para establecer contacto visual y dialéctico. Eso sí, caricias... las justas.