martes, 1 de marzo de 2016

RELATO: "Editorial Nirvana".



Editorial Nirvana


Acostumbro a escribir de madrugada en el jardín, sobre la mesa de tuca del porche. Frente a una bandeja de vidrio llena de rodajas de naranja maceradas en ron y una enorme jarra de cerveza espumosa conmemorativa de la feria de Munich. No son para mí sino para mis invitados, obran como reclamo. Entro enseguida al trapo, huelgan los saludos. Arranco con unos diálogos para romper el hielo. ¿O debería decir monólogos? No, porque sé que vendrán. También que contestarán al cuestionario más pronto o más tarde.

-    Venga, Carlos, partamos de la siguiente premisa: Apartado 7. “Cuando coincidí con él aquella mañana de sábado me sorprendió que llevara una muñequera de farmacia en el brazo izquierdo”. A ver. ¿Qué crees que te paso? Me es indiferente, lo dejo a tu elección.
a-      Eres zurdo y te lastimaste la muñeca jugando al pádel. 
b-      En tu ingenuidad ayudaste a un amigo californiano con la mudanza y terminaste tú solito cargando con el microondas durante tres tramos de escaleras.
c-       Te quedaste encerrado en el ascensor y para superar el estrés, te esmeraste en hacer y deshacer compulsivamente un cubo de Rubik.
d-      Como campeón nacional de papiroflexia intentaste revalidar el título construyendo dos mil grullas de papel amarillas en menos de tres horas y media.

Conozco a los de su especie, sus carencias, sus temores, no en vano me tragué decenas de documentales para estar al día y poder compensar con creces su precaria vida a ras de suelo. Literalmente, no podían caer más bajo. Así aprendí que a los coleópteros les atraen los cítricos y que los gasterópodos son unos borrachines empedernidos. Como ves, soy de lo más considerado, renuncio a mi creatividad en pos de un servicio personal e interactivo, no doy un paso en falso ni me adelanto a los acontecimientos. Creo situaciones y ellos se dejan llevar. Ya está, así de sencillo.

-   Adelante, Marian. Lo primero, situémonos: Apartado 8. “En cuanto a ella, enseguida le noté algo distinto, un matiz que no lograba identificar hasta que se puso a leer en voz alta. Fue cuando reparé en esos pendientes divinos de nácar blanco con un toque vintage como los botones antiguos”. Dime, es tu turno. ¿Cómo sigue? Yo sólo transcribo, el resto es cosa tuya.

a-      Te los agenciaste en el mercadillo hippy tras quedarte dormida durante la proyección un filme de autor danés rodado contra pronóstico en la península de Cachemira.
b-      Recibiste un sobre anónimo. El misterioso remitente se ha tomado muchas molestias para localizarte, no es fácil dar contigo. Dentro están los pendientes y un plano del centro de Cork con una cruz pintada a rotulador sobre una destilería de whisky en desuso a la ribera del rio.
c-       Te los dio tu prima el día de Navidad. “Deshazte de ese maldito gorro de lana  que pareces Griffin en Men in black y aparte de él, no deberían quedar más arcanianos”.  Touchée.
d-      Fueron un regalo de tu amante, por eso te los ponías apurada camino del hotel frente al espejo retrovisor del taxi. No pudiste salir de casa con ellos puestos, tampoco con tacones o sospecharían. Prefieres no dar excusas que te tiembla el labio inferior cuando mientes. 

Termino de elaborar el test y aún es temprano, de ahí que  me entretenga un rato columpiándome en el balancín con cuidado de no hacer ruido. A veces se hace larga la espera, durante la primavera me tapo con una manta de viaje y bebo chocolate mientras que en verano doy pequeños sorbos a una limonada ácida y hago fotografías. En cambio, con el frío descanso. Éste es un trabajo de temporada pues de permanecer tiritando como buen anfitrión a la intemperie,  tampoco recibiría visitas. De nada serviría porque Buda es muy claro al respecto y en invierno toca hibernar. 

Aguardo, me pongo cómodo y oculto tras unas gafas de sol que preservan mi identidad, observo a través de la lente ahumada cómo van llegando mis clientes a cuentagotas. Primero aparece revoloteando Marian, tan colorida, bajo los tempranos rayos de sol luce sus alas azules con gracia seguida de cerca por un incansable Carlos que arrastra su concha en espiral cuando aún brilla cegador el rocío salpicando de reflejos que parecen diamantes… Lo que me recuerda que hago esto por dinero, no debo implicarme en sus desdichas. “No te encariñes, solo es negocio”. 






Hacen su discreta entrada vacas, asnos, tortugas y un sinfín de viejos conocidos. También se presentan tímidamente nuevas criaturas que por el boca a boca han sabido de mi trabajo y pretenden sumarse a esta particular romería de lunes alternos.  Porque la editorial engancha, es adictiva, he dado con un filón y no pararé hasta exprimirlo. Carlos avanza despacio dejando un sendero de babas a su paso que agua la tinta y emborrona las palabras. A media mañana consigue llegar hasta la letra d del apartado siete y no lo hace al azar, la rodea a duras penas formando un pegajoso círculo. Previamente Marian había hecho lo propio, se posó sobre la letra a del apartado ocho dejando sobre la vocal escogida un reguero de polen lo bastante llamativo como para captar mi atención.  Les ofrecí una extensa gama de futuros y tras calibrar sus opciones ambos se han decidido y parecen contentos.

¿Cómo me vi envuelto en este embrollo?  Ocurrió sin más mientras devoraba en el metro “Maldito Karma” la novela feel-good de David Safier. Fue justo entonces que me surgió una idea luminosa inspirada sin duda por lo precario de un trayecto bajo tierra. Soy un oportunista, suelo pillarlas al vuelo y puesto que los libros ayudan a sobrellevar la vida, pensé que por las mismas también podrían reconfortar tras una chunga reencarnación que pinta fea. Y por absurdo que suene experimenté con un saltamontes suicida y vaya si funcionó. ¡Eureka! Comprobando así que ante el delicado estado de un individuo desesperado que flaquea a medio camino hacia la iluminación, se pueden alentar sus fantasías con un futuro inventado, por remoto que sea. 

¿Has visto alguna vez un escarabajo deprimido? Resulta muy triste, imagina un bichejo bocarriba que abatido palidece hasta tornarse incoloro con grave riesgo de quedar aplastado desprendiendo un jugo verde-cian nauseabundo... Lo dicho, patético. Por eso mismo desde Editorial Nirvana proporcionamos todo un elenco de viajes, romances y aventuras alternativos, materializamos sus más íntimos deseos en packs integrales de cuentos personalizados a un precio de lo más asequible. Las urracas pagan en dinero y las abejas en especie, naturalmente, en cómodas mensualidades. Diría que realizo una importante labor social, no tengo mala conciencia ¿O debería? Me valgo de un vacío legal, trajinar con sueños no es delito. No hay engaño puesto que yo no prometo nada, todo es ficción y así consta en letra pequeña.

Claro que para cuando yo muera, no tendré quien me escriba como el coronel de Barranquilla y dado mi florido historial de fechorías, podría acabar convertido en ameba por derecho propio. La verdad, no me extrañaría… Pero seguiré jugando, pase lo que pase. Lo juro. Acepto el reto, no me asusta la partida. Soy bufón, juglar, genio y figura... Me apuesto una molécula de oxígeno a que daré con el chiste perfecto. Es más, me burlaré de mí mismo hasta fagocitarme de la risa.









11 comentarios:

  1. Me parece que ya ha dado con el mejor chiste del mundo.
    Lo ha publicado una revista de investigación americana.

    Mas o menos dice:
    Dos cazadores, buenos amigos, salen de madrugada a practicar su hobby.
    Uno tropieza y cae de una altura considerable. El otro corre en su ayuda y ve que se ha abierto la cabeza, roto la columna, y que no respira ni tiene pulso.
    Llama a urgencias, dice: Por favor ayuda, creo que mi amigo está muerto.
    La telefonista le contesta: Tranquilo, primero asegurese de que está muerto.
    Un silencio. Luego se oye un disparo.
    "Ya, seguro. ¿Y ahora que?

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  2. jejeje

    Ahora te diré que me ha encantado tu relato, aunque yo no hubiera escogido
    -se ve que tengo poco de caracol o mariposa- esas opciones.

    Es de emprendedores avispados aprovecharse de las lagunas del sistema.
    Y tu prota lo hace muy bien.

    Sigue siendo sumamente atractiva la temática que eres capaz de imaginar.

    pd: Lo de la revista y el chiste es cierto.

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    1. El prota es un listillo sin escrúpulos, ha inventado un sucedáneo de droga inocua que funciona a la perfección. Personalmente, no le culpo, supongo que alguien tenía que hacerlo. Siempre existirán los cuentos de hadas solo que ahora la magia nos promete otras cosas. Los sueños son sueños y mientras no se cumplan... Cuanto más cercanos, mejor :D

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    2. El chiste es creíble, me imagino al pobre hombre (con pocas luces, Obiously) siguiendo las consignas telefónicas a pies juntillas, supongo que en estado de shock :S

      Sobre la serie que te dije: Me equivoqué de canal TV, es AtresSeries. un canal nuevo de la TDT que lleva mes y medio funcionando. Si te gusta, ya me dirás.

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  3. Este parece el genio burlón de los sueños, ofreciendo alternativas tan dispares que hacen díficil la elección...pero aún así Carlos y Marian eligen y parecen muy seguros en su respuesta. Ojalá continúen mucho tiempo con su ilusión reencarnada en ser campeón de papiroflexia o luciendo pendientes divinos de la muerte del sitio más insospechado.
    Lo dicho, un genio este Eugenio! le veo futuro tal y como están las cosas...
    Un beso!!

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    1. Hola, M.Esther. A ambos lectores, aún invertebrados, aún les queda un buen trecho hasta volver a ser humanos. Por eso, entretanto, es así como se entretienen soñando con una vida mejor. Cosa que, de algún modo, supongo que hacemos todos :)
      Yo le veo un futuro holgado mientras viva, pero cuando se muera igual Buda, harto de sus jueguecitos, le pasa factura :S Ojalá que ande atareado y este hombrecillo le pase desapercibido.

      Un besazo.

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  4. Hola, Mere... En efecto, Carlos y Marian han elegido y su futuro dependerá de esta elección
    A un escritor siempre se le presentan muchos caminos, posibilidades diferentes
    Y me parece una idea genial que los propios personajes sean los que dirigen al autor
    Si escribir ya es una diversión maravillosa... entonces sería lo más de lo más
    Besos

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    1. Hola, Mela. Sí, sería maravilloso dar a elegir futuros alternativos a los personajes y que ellos eligieran. Y si están prisioneros en una vida precaria a la espera de reencarnarse en otra criatura y otra... Figútat qué subidón :)

      Gracias, Mela. Creo que Nico y Blas, si les preguntaras, querrían ser exactamente así. Tal como son :D

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  5. hello mere is an honor to read you every day , kisses andy

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