martes, 9 de abril de 2013

Viola versus Darwin




Somos la Tª de la Evolución, en estado puro

Charles Darwin viajó por el Pacífico-sur dibujando una fauna perdida, animales extinguidos en otras regiones del planeta sin razón aparente, concluyendo que esas mismas especies no consiguieron sobrevivir en ecosistemas adversos. ¿Qué pasó? ¿qué fue de ellos? Algunos evolucionaron, otros simplemente huyeron tratando de SOBREVIVIR... Lo mismo que ocurre a diario en TU CIUDAD, sin ir más lejos.

Mientras los gorriones cada vez pían más fuerte para hacerse oír entre cláxones y motores, los perros comen galletas y apenas ladran, para no molestar, dada su triste condición de "juguete" de usar y tirar.  Antes veían en blanco y negro, ahora distinguen colores primarios. Demasiados semáforos en rojo que terminan en frenazos. Los gatos solían subir por las paredes escalando cañerías, entraban por el ventanuco del vecino internándose hasta la cocina para hacerse con esas sardinas que burbujeaban casi chamuscadas sobre la sartén... Comenzaron por extraviarse entre los conductos del aire acondicionado y caer al vacío por chimeneas en desuso, activaron tantas alarmas anti-robo que ahora, cuando llueve, se quedan hechos un ovillo sobre el cojín escuchando la telenovela y en verano, se protegen del sol bajo la antenas parabólicas. Y es que los tejados, ya no son lo que eran. Las cigüeñas ya no anidan en los campanarios, recomponen sus palitos sobre un cartel de Publivia frente a la autovía. No escucharás el zumbido de mosquitos ni cucarachas porque vivimos en Wonderland y apestamos a insecticida. Y me pregunto ¿qué fue de las ardillas? ¿a dónde marcharon tantas, tantísimas golondrinas? Las echo de menos, yo y las estatuas.

No te extrañe, nosotros también mutamos aunque no te des cuenta y son muchos son los que desaparecen a diario sin dejar rastro apenas. ¿Dónde están los serenos, pregoneros, sombrereros, deshollinadores, barberos, chatarreros, carboneros, curtidores? ¿Hace cuánto que no oyes silvar al afilador con su bicicleta? Aún las calles del centro conservan su nombre, pero lo cierto es que se esfumaron. Así fue, visto y no visto.

Ya no verás side-cars ni motocarros de tres ruedas. Hombres paseando con bastón, sombrero, bigote... La gente va aquí o allá, ya nadie pasea. Caminan rápido, muy rápido. Ahora que compran online ¡para qué detenerse frente a los escaparates! Pulgares deformados, de tanto teclear. Miopía creciente. Pupilas contraídas, pues la exposición a la luz es continua en la ciudad que nunca duerme bajo luces de neón frías e interminentes.


Ser o no ser, adaptarse o morir
salvo que... ¡conozcamos a Viola!





A propósito de Venecia (fragmento)
"A propósito de Viola..."

Hay pocas ciudades que envejecen. Las más, laten por si solas. Se reinventan, para no morir jamás. Entre las primeras está Fez, en Marruecos, donde las mujeres no dejaron de ser sombras, donde aún los teñidores de telas bañan el zoco de olores nauseabundos. Lo siento, salvo que lleves un fajo de billetes y estés dispuesto a gastarlo, no estás invitado a su pequeño mundo. Fez morirá sin tí, su destino no te pertenece. Pero no te rindas, sigue buscando. Hubo personas, las menos, que encontraron su sitio. De hecho es cuando más perdido estás, que la ciudad te reclama. Por extraño que parezca, es así como funciona.

Viola lleva un chaleco de alpaca sin mangas. Debajo asoma una camiseta que según el día, cambia de color y de mensaje explícito: "Wellcome to Bora-Bora", "Ramones", "Mickey Mouse is a Rat", "Harley-Davidson, road is yours" "Keep England tidy, stay in bed" "Springteen for ever". También lleva una diadema de tela ancha, unas veces naranja y otras azul, en un intento fallido de apartarse esos rizos asilvestrados de la frente. Un pendiente étnico en la oreja izquierda, una perla diminuta en la derecha. Una chica de contrastes, ni ella misma se aclara. Lleva acuestas una mochila vaquera grande e informe. Ahí guarda casi de todo, viniendo a ser tan socorrida como el mágico bolso de Mary Poppins. Alterna short y falda larga, según tenga la muda sucia o recién lavada. Hay días que hasta se pone la ropa mojada... ¡Ya se secará! dice entre estornudo y estornudo. Luego están esas medias con enganchones que empañan aún más de desaliño su aspecto descuidado, a lo que no ayuda precisamente sus increíbles botas de cordones, por las que Agatha Ruíz de la Prada daría un ojo y si me apuras ¡un riñón! sin ningún recelo. Esa es su indumentaria, haya lluvia o haga sol, tanto en agosto como en enero. Con esos andares toscos, como una Heidi perdida en el espacio-tiempo...  

Esta es Viola, nuestra Viola. Nada más y nada menos. Patea la plaza de San Marcos, sin rumbo fijo haciendo tiempo. A las diez entrará a trabajar vendiendo raciones de pizza fría, refrescos de cola y oranginas para turistas en sandalias. Mientras tanto camina despacio, sin prisa. Observa la ciudad como pocos lo hicieron. Busca los primeros rayos de sol que refleja el canal, los mismos que pintara William Turner una lejana primavera. Descubre un puñado de leones que salpican solemnes las fachadas barrocas de iglesias y palacetes casi ahogados, enmohecidos... Así es, Venecia languidece. Y es justo entonces que aquellas fieras malditas, vigilantes condenadas a la piedra por siglos, reparan en ella. 

¿Por qué Viola? ¿por qué ella precisamente? ¿por su ropa destartalada? ¿por ese andar entrecortado e indeciso, así como en zig-zag? Claro que no. Es la mirada lo que llama su atención, posada en la lejanía. También la delatan sus pupilas, que aún se dilatan en la noche. No importa de donde proceda la pequeña Viola,  nuestra Golondrina es una SUPERVIVIENTE. Y es así que Venecia, en su agonía, la retendrá por siempre.

De vez en cuando se me ocurren historias chulas que quedan en eso,  en historias. "A propósito de Venecia" podría ser mi novela, si decidiera ponerme en serio con ella. Por ahora no es más que una idea que me gustaría plasmar en papel... no sé. Te lo cuento ¡aunque esté todo en el aire! Qué locura ¿no? Porque si te hablo de ella, me lo creo un poco más. E igual hasta sigo adelante.


¿Ser o no ser? ¿Adaptarse o morir?
Hay más opciones
"SONG OF THE CAGED BIRD"



* Autor: María José Enrech Francés. 
(ruego respetar autoría)

40 comentarios:

  1. Buenos días Mere. Aún no puedo decir soleados, pero espero que no tarden demasiado en llegar. Mira, aquí por esta calles más al norte, sí que cada sábado oigo, bajo las sabanas, el silbar del afilador con su bicicleta. Y me parece una imagen deliciosa, aunque no termina de encajar en medio de tanto cemento. Respecto a Viola, Venecia, yo te digo que sigas adelante. Ya tienes un buen club de seguidores que seguramente estarían encantados de leerte en otros formatos. Un beso y buena semana,

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    1. Me alegro que todavía haya momentos, en los que se pare el tiempo. Adoro la modernidad, pero eso no quita para que sienta nostalgia de todo aquello que se fue.
      Gracias por los ánimos, Marisa. La cuestión es si seré constante ¿? Lo intentaré, un beso

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  2. Mere tu eres un torbellino y las ideas fluyen de ti como los riachuelos de las montañas, y además eres muy amena, entonces a qué esperas...

    Yo echo mucho de menos a los serenos, aquél amigo siempre presto a abrirme la puerta en mis largas noches viviendo Madrid.

    Besos,

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    1. Justo es lo que necesitaba, Sau, un empujón de los amigos :) Lo intentaré, a ver si por una vez no abandono a medio camino.

      Para bien o para mal Madrid se reinventa, cambia cada día. ¿Los serenos? Se los debió tragar la tierra ¡con llaves y todo! Algún tilín furtivo... seguro que ¡son ellos! Por otra parte, míralo así, le diste esquinazo a unos cuantos testigos de tus largas correrías. A ver qué contarían ;) Un beso

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  3. Me ha encantado el comentario
    gracias por tu aporte es muy importante
    un beso y te estoy siguiendo con poco tiempo pero lo hago
    Carmen

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    1. De nada, Carmen. Me encanta pasarme por tu blog y leer de verdad, con ganas. Un beso

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  4. Hola Mere, me ha encantado el vídeo... esa chica danzando con el violín y las velas encendiéndose a su alrededor.
    Es cierto que todo cambia, vamos avanzando, supongo. También encuentro natural que alguien sienta nostalgia de días pasados.
    "A propósito de Venecia", el título me encanta. Si te animas, yo te leo, seguro.
    Besos

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    1. Todo avanza, Mela, nada se detiene. Y no nos queda otra que acompasarnos con el ritmo de las mareas. El vídeo es muy estético, pensé que te gustaría.
      Y si el título te convence... ¡yupiii! Es importante la primera página :) Gracias, de corazón. Besos

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  5. :) Del alelamiento del principio, a la nostalgía de lo que ya no se ve (alguna aún la veo pero algo se ha perdido pese a seguir existiendo, cierto y triste es)
    Conocer a Viola un placer y una maravilla. La canción otra.
    Ahora te comento de la novela... si es por necesidad de creer me lo puedes decir cuantas veces quieras, créelo y ojalá sea!!! Peregrinación a los astros si es necesario, me encantaría que fuese, de verdad de la buena. Sea Venecia o donde sea que quieras llevarnos. Aquí tienes más que ojos dispuestos, no solo míos y no únicamente con la mirada de los ojos estaría dispuesta, lo sabes! Y si pudiese pedir un deseo, lo pido. Deseo que no se escucha, es por dentro y silencioso (Quiero una novela, la suya, que sea posible, que sea, como sea pero que sea adelante)
    Un besazo Mere

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    1. Estaba pendiente de saber cómo os caía Viola... Ansiaba esa respuesta y llegó de tu mano.
      Me pondré en serio con la historia, Marilú, lo intentaré de veras. Aunque de eso a que lo logre, hay un abismo. Me falta motivación, organización, disciplina... pero sabiendo que estáis ahí, me siento más fuerte. Además, no soy tan desalmada como para abandonar a su suerte a Viola :)
      Gracias, amiga mía. Un beso

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  6. Quue bonito el video, Mere. Cada día te superas!!!!

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    1. Gracias, José, es que me divierto tremendamente con lo que hago :) Un beso

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  7. Sigue Mere!!!! Muchas veces los grandes proyectos empiezan a partir de pequeñas locuras ;)
    Un besito

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    1. Lo haré, Anuca. Tengo mucho que ganar y poco que perder :) Gracias ¡por los ánimos! Un beso

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  8. Mere, ya lo sa bes, yo también te animo, Venecia, Viola, o Fez, que a mi me fascinó.
    Un beso.

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    1. Somos dos almas viajeras, Lidia. Vendrás conmigo :) Un beso

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  9. Has dado un paso importante para conseguir lo que te propones: contarlo. Y no es ninguna locura.

    Me gustan tus historias chulas.

    Saludos

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    1. Gracias, Beatriz. Tú también escribes y seguro que te haces cargo de lo difícil que es empezar y confiar en uno mismo. Lo intentaré, en esas estamos :) Un beso

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  10. Muchas cosas Mere,
    Tiendo a buscar el retiro, en Grazalema todavía existen artesanos del cuero que arreglan zapatos, lacobertura del móvil falla, la carretera es casi de piedra y hay periodos de lluvias torrenciales combinados con un sol abrasador que saca a relucir el blanco de la cal de las casas y conduciendo a los largo del camino, cigüeñas, muchas, en cada poste solitario un nido y a ambos lados de la carretera campo, campo y más campo. En una hora y media estoy en otro mundo. También están las calles de Cádiz, llenas de comercios y negocios tradicionales con la fecha de inauguración orgullosamente pintada en la puerta, una ciudad abocada al mar en la que las grandes superficies no habían tenido su sitio, las calles son tan estrechas que solo se puede ver la Torre Tavira acercándose a su pie y girando la cabeza hasta un ángulo casi imposible. Están haciendo un Corte Inglés pero de Puerta Tierra para afuera, una vz que te adentras en el centro solo hay casas y olor a sal.
    Adelante con Viola y con Venecia, aquí estamos contigo. Un beso :)

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    1. Me encanta saber de rincones suspendidos en el tiempo, Yossi. Disfrútalos, tú que puedes. Igual para el verano yo también me paso.
      No abandonaré a Viola, prometo sacarla de este entuerto :) Un beso

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  11. Entre los canales silenciosos de Venecia, Viola se mueve con la vida que tú le das a su personaje, puede ir, volver, vender más pizzas o menos, pero su vida es y será la que tú vayas decorando palabra tras palabra, frase y capítulos y desde luego te aseguro que estaré (diría estaremos) encantados de seguir sus pasos e incluso pasear en góndola con ella... Venecia envejece hace ya tantos años que es precisamente eso lo que le da ese halo de calidez tan hermoso... Como tu post!!

    Besos!

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    1. Tus ánimos, FG, me llegaron muy adentro. Es justo lo que necesitaba, saber que Viola no existe sin mi y que de mi depende que prosiga o no su historia. Tendré que echarle una manilla :) Y entre tanto disfrutaremos de Venecia.
      Lo intentaré, un beso

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  12. ¡Vaya, Mere, un encanto de palabras! Se leen con fluidez.

    Desde las ventanas de mi casa (mejor decimos piso) veo aparecer las cigüeñas en enero y, pronto, comenzarán las primeras golondrinas. Eso sí, ya no pasa el estañador.

    Besos.

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    1. Me alegro por ti, Ignacio. Tienes acceso a un mundo que yo hace tiempo que perdí, no sé ni cómo se me escurrió de los dedos. Un beso

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  13. Hola Mere, mira... hoy no te comento la historia (que me ha encantado como cruzas, como siempre)
    Hoy te digo que me alegra haberte leído expresar algo en voz alta.
    Y lo digo con orgullo, eh?
    Un beso enorme

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    1. Si lo he conseguido, en parte es gracias a ti. Y pretendo seguir, a ver qué pasa. Gracias, de corazón. Un beso

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  14. En cualquier caso, si mutamos en homo Internetensis y es para hacer volar la imaginación como tú lo haces, y además con gusto y clase: BIENVENIDA SEA LA MUTACIÓN.

    Pero yo todavía uso sombrero, a veces.

    Y hasta paraguas cuando llueve, pisando los charcos y todo!!!

    Un besazo

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    1. El sombrero te da un aire atemporal, un algo de caballero. No lo pierdas, por lo que más quieras. Y sobretodo, no dejes que se lo lleve el viento.
      *Eso sí, si no llueve ¡mejor! Del paraguas casi que podemos prescindir, sin muchos miramientos :)

      Me despido hoy de vos, Sir. Valaf, con la debida reverencia y un beso. No voy vestida para la ocasión, disculpe mi atuendo.

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  15. Sigue adelante, Mere!! No lo dejes ahí, por favor. Ya sabes el dicho de ...mejor llorar por aquello con lo que una se ha atrevido que por aquello que se ha dejado en el tintero. Y nunca mejor dicho.
    Besines,

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    1. Eso es lo que haré, Carmen, lo intentaré por lo menos. No soy muy echada para alante, de hecho me ha pasado muchas veces el no arrancar por miedo a no sentirme capaz... pero no ocurrirá esta vez. Se lo debo a Viola, os lo debo a todos vosotros. Gracias, Carmen, me ha hecho mucha ilusión. Un beso

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  16. Me ha gustado tu primera reflexión pero me ha gustado más la historia de Viola le veo futuro a esa chica animo con la novela, un beso.

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    1. Me alegra muchísimo que Viola te caiga bien y que te importe lo que vaya a ser de ella. Es mi criaturita y si está en este embrollo, es porque yo la metí en esto. Con tal motivación y vuestros ánimos, creo que sí ¡seguiré escribiendo!
      Tus palabras es justo lo que necesitaba... Gracias, Rocío. Un beso

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  17. Tienes que seguir Mere! Que nos has dejado a much@s con ganas de conocer más a Viola. Y me ha gustado mucho tu reflexión. Y es que todo avanza tan rápido, demasiado rápido a veces...
    Pero no me preguntes por qué, pero de las primeras cosas que se me ha venido a la cabeza cuando iba leyendo esa reflexión... ¿Qué habrá sido de los pobres gusanitos que siempre encontraba de pequeña en las manzanas? No estoy bien de la cabeza, lo sé...
    Besotes!!!

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    1. Hace tiempo que me pasa, que el mundo me pasa por delante y no lo reconozco. Luego pienso "pues nada, esto es lo que hay" y cojo el carro del futuro, como hacen todos. Y es que no queda otra que seguir el ritmo que marcan los tiempos, si bien siento pesar por lo que dejo atrás, que no volverá me temo.
      *Iremos de la mano Viola y yo, lo prometo.
      *Y sobre el gusanito (tu referencia,Margari, me encantó :) Deséale lo mejor, en algún campo de berros. Un beso

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  18. Hola Mere!
    Esta entrada me ha gustado especialmente. De las que dejan huella. La primera parte, triste al ver como es la vida ahora y como se echan de menos ciertas cosas del pasado que han desaparecido. Unas vividas y otras contadas.
    "A propósito de Venecia" ME GUSTA. Si te animas a escribir, ten por seguro que en Murcia tendrás una lectora fiel :)
    Me quedo con ¿Adaptarse o morir? Hay más opciones. Pues sí! Claro que las hay.
    El video no lo conocía. Lo he descubierto gracias a ti. Ya no se las veces que lo he visto. Me encanta este tipo de música. La última parte con las velas, la mejor.

    Un beso.

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    1. Se entremezclan los recuerdos con imágenes no tan lejanas en blanco y negro... definitivamente eran otros tiempos. Apena, pues sí, pero lo mejor ¡estamos vivos! testigos de cómo cambia todo.
      No se si será Viola o Damian o Rosa... pero la historia está al caer, me veo con fuerzas.
      Gracias, Leo, de corazón. Un beso

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    2. Me hará MUCHÍSIMA ILUSIÓN leerla!. Un beso

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    3. Este verano tal vez me ponga en serio, a ver si me organizo que soy un poco desastre para eso.
      Gracias por los ánimos, ya te diré de qué va porque en la trama ha habido muchos cambios ¡para bien! claro :) Un beso

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  19. Que buena entrada, adaptarse a los tiempos actuales, pero seguir siendo la persona que somos a pesar de todo, muchas cosas se perdieron, pero nadie nos saca los recuerdos de antaño. Saludos y vamos con tu novela.

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    1. De eso trata, de adaptarse pero sin renunciar a los recuerdos. Algo haríamos bien en nuestros tiempos mozos e incluso de no ser así, algo aprenderíamos.
      La novela no la abandonaré, me pondré con ella en serio este verano ¡o antes! si me concentro :) Besos

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